Se venden más máquinas. Tras siete años de descenso, el mercado español se recupera

En un entorno que cambia cada vez más rápidamente, las empresas fabricantes de equipamiento para la construcción tienen que ser flexibles y ágiles para hacer frente a la volátil demanda de unos mercados impredecibles, dentro de un entorno normativo muy exigente y la necesidad de ofrecer la última tecnología. En este escenario tan competitivo, el año 2015 resultó ser favorable para esta industria en España, no así en el mercado internacional, que cayó más de un 10%.

En los últimos años, venimos observando cómo las economías desarrolladas de todo el mundo alternan periodos expansivos y momentos de profunda recesión. A falta de una estrategia de crecimiento a medio y largo plazo, tanto para el sector de la construcción como para el conjunto de la actividad industrial en Europa, conviene resaltar que una industria sustentada en bases más sólidas es muy importante para impulsar la recuperación económica, la vuelta al crecimiento y una mejora en los índices de empleo en el continente. Para alcanzar estas metas, Europa necesita el esfuerzo concertado de todos los actores de la sociedad.
Corresponde a los responsables políticos de la UE el establecer las condiciones marco adecuadas, ofrecer a las empresas seguridad para elaborar estrategias de futuro, sobre la base de unas políticas coherentes, acceso a la financiación, espacio para la innovación y con la vista puesta en los mercados extranjeros. También resulta necesario invertir en infraestructuras.

El mercado de la maquinaria hoy
Para el año que comienza, se espera que las ventas mundiales de equipos de construcción crezcan un 3,9%, hasta alcanzar la cifra de 760.508 máquinas. Esta mejoría prevista viene a revertir el débil desempeño de 2015, año durante el cual el mercado cayó más del 10% respecto a las aproximadamente 818.000 máquinas vendidas en 2014. Se espera que los mercados de Europa, Norteamérica e India encabecen esta tendencia al crecimiento. Asimismo, según las previsiones de Off-Highway Research, presenciaremos una estabilización en China, país en el cual las ventas de equipos de construcción han caído desde las 435.070 unidades de 2011 a las 131.345 de 2015, lo que implica un descenso del 70% en el transcurso de cuatro años.
“No cabe ninguna duda que 2015 fue un año duro para el sector de los equipos a nivel internacional, como consecuencia de la ralentización del crecimiento de la economía mundial y la debilidad de los precios de las materias primas”, afirma David Phillips, consejero delegado de Off-Highway Research. “Las ventas de unidades cayeron a su nivel más bajo desde los años de la crisis, y en este sentido el desplome del mercado chino fue especialmente dramático. Sin embargo, el repunte observado en varios países desarrollados contribuyó a equilibrar algunas de estas pérdidas”, concluye el ejecutivo.
Según estimaciones del Comité Europeo de Maquinaria Construcción (CECE), Alemania, España y Portugal son los mercados donde se prevé un mayor impulso en los próximos meses. También se espera que los demás mercados de Europa occidental, central y oriental continúen mejorando, con las únicas excepciones de Rusia y Turquía. Fuera de Europa, y en coincidencia con las observaciones de la consultora Off-Highway Research, los mercados que se irradian más optimismo son América del Norte e India. China y América Latina siguen encabezando la lista de mercados que despiertan más preocupación, mientras que el crecimiento de Oriente Medio parece haber terminado.
Desde el comienzo de este largo periodo de recesión que vivimos, se alternan los años de crecimiento con los de retroceso, dentro de un ciclo sin fin. Por lo que respecta a España, la situación se puede describir de la misma forma, si bien los intervalos de tiempo se presentan más duraderos: casi una década, correspondiente al periodo 2008-2014, con cifras en negativo, que sucedieron a una auténtica edad dorada de la construcción (1996-2007). Pues bien, tras una tímida recuperación durante 2015, el sector traerá aún mayores alegrías en 2016 y 2017, clarificación del escenario político mediante.
BBVA Research, el servicio de estudios de la entidad financiera del mismo nombre, estima que la inversión en construcción subirá en España un 3,8% en 2016, con lo que sumará dos años en positivo después de haber encadenado siete ejercicios consecutivos de caídas. En su último informe, se indica además que en 2017 la inversión en construcción registrará un aumento del 5,9%. Por su parte, la inversión en vivienda se incrementará un 4,2% en 2016 y se elevará hasta el 8,2% en 2017.
Los datos de BBVA señalan que la inversión en construcción finalizó 2015 con un aumento del 5,6%, y un +2,9% la inversión correspondiente a la vivienda. Así, desde el banco se señala que “el sector inmobiliario avanza en su recuperación, si bien a un ritmo inferior al esperado un año atrás”. Pese a ello, el sector empieza a situarse en niveles saludables y está previsto que evolucionen positivamente en los próximos dos años. La recuperación del mercado de trabajo y de la renta de los hogares y la previsión de tipos de interés bajos sustentarán el crecimiento de la demanda residencial en el próximo bienio. De este modo, se subraya que “la actividad constructora responderá al avance de una demanda cada vez más sólida, con un aumento en la iniciación de viviendas desde los niveles mínimos en los que permanece actualmente”. No obstante, alerta de que teniendo en cuenta la “sensibilidad” del sector inmobiliario a la “incertidumbre” sobre la política económica, el inicio de la recuperación “está siendo menos vigoroso que lo previsto hace un año”.

Hasta 175.000 viviendas nuevas en 2016
La mitad de los directivos encuestados por la consultora inmobiliaria CBRE considera que en 2016 se iniciarán entre 100.000 y 175.000 viviendas nuevas, todo ello en un ejercicio en el que la mayoría cree que los precios del alquiler, así como los precios de venta, se incrementarán en todos los segmentos. Un 83% de los directivos cree que los precios de venta en el sector residencial ya han tocado fondo, frente al 46% que sostenía esta afirmación durante el año anterior y, por primera vez desde 2007, un 40% señala la vivienda nueva como un segmento de alto potencial, el doble que el pasado año. Según Lola Martínez-Brioso, directora de Investigación de CBRE, el mercado residencial se mueve a dos velocidades, y los mayores incrementos de precios se esperan en Madrid, Barcelona, Baleares y Costa del Sol. De media, la subida en Madrid se sitúa en el entorno del 5% y, de forma generalizada, se espera más actividad promotora en aquellas regiones de España donde hay más demanda y menos stock. Las oficinas seguirán siendo el activo más codiciado. El 42% continuará apostando por ellas, seguido de un 22% que lo hará por el residencial. Asimismo, también se espera un auge en la rehabilitación. Por supuesto, la estabilidad política vendrá a favorecer el sector.